La Navidad puede ser blanca, pero también peligrosa para el
perro si no se toman las precauciones precisas.
A continuación se describen los riesgos navideños más habituales para
los canes y se explica cómo evitarlos.
1. Adornos del árbol de Navidad seguros para
animales
El hecho de que toda la familia participe en la colocación de llamativos
objetos en un árbol puede ser interpretado por un perro joven, activo o
juguetón como una actividad divertida, en la que participar. Esto conlleva un
riesgo y es que el perro puede ingerir los adornos de Navidad.
Los adornos de
Navidad seguros para perros son irrompibles y carecen de filos cortantes
Los perros, sobre todo si son cachorros, se caracterizan por ser
curiosos con los brillantes y coloridos adornos de
Navidad. Sin supervisión, no es extraño que el animal aproveche para
olisquear los adornos y mordisquear cables o bolas.
¿Cómo evitar los accidentes? Algunos
adornos de Navidad pueden tener filos cortantes y, si se rompen, pueden
provocar cortes y
heridas. Hay que evitar este tipo de decoración navideña, que no
solo pondrá en riesgo a los animales, sino también a los niños de la casa.
Otra forma de evitar accidentes es impedir el acceso del perro a
la zona donde se encuentra el árbol de Navidad. Para ello, se puede
utilizar una malla.
2. Cables y luces festivas
Las luces son uno de los adornos navideños más típicos y presentes en
muchos hogares. Sin embargo, son un reclamo peligroso para los perros, ya que
precisan electricidad y un mordisco en un cable puede suponer una descarga
eléctrica para el perro, que le puede provocar quemaduras.
¿Cómo prevenirlo? La desconexión de los adornos lumínicos cuando el can
está solo en casa es la forma de evitar accidentes. También se puede camuflar
el cable para evitar que el perro lo mordisquee.
3. Regalos peligrosos
para el can
Ciertos regalos, como los teléfono móviles, suelen llamar la atención de
algunos perros, hasta el punto de destrozarlos con sus dientes y tragarse los
componentes.
Los casos de perros con piezas de móviles en su estómago comienzan a ser
habituales. Por este motivo, en Navidad, al igual que durante el resto del año,
conviene no dejarlos al alcance de los perros, ya que les llama mucho la
atención.
4. Intoxicaciones alimentarias en Navidad
Las intoxicaciones provocadas por alimentos perjudiciales para
la salud del perro, como el cordero o el chocolate, suponen otro peligro
navideño. La ingesta de carne y huesos de cordero provoca en el can problemas
gastrointestinales. No digiere con facilidad la grasa de esta carne. Por otro
lado, uno de los componentes del chocolate, la teobromina, resulta tóxico para
el can.
¿Cómo evitar las intoxicaciones del perro? No variar de
forma sustancial la dieta del perro durante la
Navidad es una de las claves. Por otro lado, hay que informar al respecto a las visitas. Los niños y el resto de familiares y amigos deben evitar ofrecer al perro dulces u otros alimentos que pongan en riesgo la salud de su mascota.
Navidad es una de las claves. Por otro lado, hay que informar al respecto a las visitas. Los niños y el resto de familiares y amigos deben evitar ofrecer al perro dulces u otros alimentos que pongan en riesgo la salud de su mascota.
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