Escoger el minino correcto para tu hogar hará una gran
diferencia en como tú y la mascota se relacionen. Asegúrate de hacer tu tarea
antes de comprometerte a una relación que puede durar muchos años. Los gatos
vienen en diferentes tipos: raza pura, doméstico, pelo largo, mediano, pelo
corto, y en una variedad de colores.
1.Decide
si quieres un gato de adopción o uno de raza pura.
2. No olvides tenerle todas las vacunas al día y los controles al veterinario.
3.
Gatos que regalan: Algunas
personas con gatitos son felices regalándolos cuando su propio gato tiene cría.
Esto también te da la oportunidad de que veas a los papás del minino, que tan
grande puede crecer y como se verá. De cualquier manera, este gatito puede
tener todo tipo de parásitos: pulgas gusanos y hasta ácaros de oído.
4.
Debes de saber si el gato es de pelo largo, medio, o corto. Si hará una diferencia en cómo se verá, y que
tanto pelo se le caerá. Mientras más pelo tenga, más se le caerá, etc. No será
tanto problema si escoges un gato del color de tu alfombra, sillón, sillas,
etc. Un gato de pelo largo es más factible que tenga “bolas de pelo” que un
gato de pelo corto. Los gatos se limpian con su propia lengua y el pelo se pasa
a su estómago se hace bola, y luego lo vomitan. Puedes ayudar aseando al gato
para quitarle un poco del pelo. Mientras más lo asees menos bolas de pelo
habrá.
5. Tener un gato que ya
desgarrado o que le quites las garras a tu gato significa que ya no puede estar
afuera. Necesitan
sus garras para defenderse.
6. Debes saber si el gato
es hembra o macho. Los machos son más agresivos que las hembras. Los machos
marcan su territorio, orinando en varias partes de la casa, pero esto no pasará
si el gato es castrado antes de que lo tengas. Las hembras también lo pueden
hacer, pero es menos común.
7. Son muy fáciles de
entrenar. Pon a
un gato en la caja de arena una o dos veces, y automáticamente sabrán en donde
tienen que hacer sus necesidades. Esto es porque los gatos usan un lugar en
específico, pero un perro tiene otro tipo de comportamiento.
8. Acaricia al gato cuando
quiera ser acariciado. Déjalo en paz, cuando quiera ser dejado en paz. Así es de
fácil. ¡No hay nada mejor que te brinque a las piernas porque quiere ser
acariciado! (Pero le tomará como un año, para que confié en ti y quiera
sentarte en tus piernas por mucho tiempo).
9. Deja que el gato se
acostumbre a tu casa. Cuando lo lleves a tu casa por primera vez, se esconderá. Debes
de tenerlo dentro de la casa, la primera semana, para que sepa que tú lo
alimentas.
10. Si tienes más gatos, es
muy importante traer al gatito de manera gradual. Pon al nuevo minino en un cuarto, y ahí ponle su caja de
arena. Mantén la puerta cerrada, pero asegúrate que tenga lo necesario. Ponle atención
a tu otro gato o gatos y dales premios extras. Así sabrán que el gatito
está ahí, por el olor.
Tal vez huelan la puerta, o la rasquen, tal vez le hagan ruido. Esto está bien. Los gatos que se conocen deben establecer límites y territorios. No quieres que los gatos piensen que el nuevo gatito está invadiendo territorio, o tendrás gatos infelices, que empezaran a hacer cosas para mostrar su enojo.
Tal vez huelan la puerta, o la rasquen, tal vez le hagan ruido. Esto está bien. Los gatos que se conocen deben establecer límites y territorios. No quieres que los gatos piensen que el nuevo gatito está invadiendo territorio, o tendrás gatos infelices, que empezaran a hacer cosas para mostrar su enojo.
Tu gato empezará a
aceptar al gatito como su hermanito o su gatito propio, es posible que juegue
con él y se laven mutuamente y se hagan amigos. Esto vale la pena.
No hay comentarios:
Publicar un comentario